sábado, 30 de septiembre de 2023

Milena Jesenká.

 Leyendo el libro de las costureras de Auschwitz, me encuentro de nuevo con ambos, Milena y Kafka.

Milena fue una columnista Checoslovaca quien conoció personalmente a Kafka y desencadenó en las famosas cartas a Milena. Lamentablemente la obra de ella quedó en el cuasi olvido, pero ahora mismo estoy embelesada de saber que además de escribir sobre política, daba consejos de estilo siendo la corresponsal de moda de Viena. 

Su vida fue mucho más que moda pero sin duda, la moda tuvo mucha importancia ya que en ese entonces *la riqueza de la industria textil era dominada por capital y talento judíos* cita: Las costureras de Auschwitz. 


Me hace ruido su amor ciertamente indeciso también. Un amor inalcanzable que me deja un sabor agridulce, pero algunos ansiamos esos amores que no llegan a ser y son todo al mismo tiempo, que dominan, rasgan, perturban y sosiegan.

Que tiempos más difíciles entonces y ahora, sin embargo, se puede encontrar belleza aún.



1 comentario:

Norma2 dijo...

Me interesó el tema que cuentas y que no conocía. Fui en busca de más y leí que: Hilo y aguja, suerte y optimismo, lealtad y amistad salvaron a algunas mujeres de morir en una cámara de gas en medio del horror de Auschwitz. Bracha Kohút fue la última sobreviviente de un grupo de veinticinco mujeres jóvenes que cosieron para los altos mandos nazis durante el holocausto, y que pudo dar su testimonio antes de morir en febrero de 2021 de Covid. Vestir al enemigo les permitió seguir viviendo en una contradicción sin precedentes. Un salón de modas en un campo de concentración. Y manos esclavas cosiendo doce horas seguidas. Cuando las habían desvestido, deshumanizado, rapado el pelo con la excusa de los piojos y del tifus, y privado de su identidad y hasta de su dignidad, ellas cosían las prendas más glamorosas para quienes les habían sacado todo.
Veré si onsigo el libro.
Besos y feliz finde