Ahora que Fanny ha crecido un poco me ha entrado de nuevo el piquete de la fotografía, hace años cuando me daba por subir las fotos a Flickr y me pidieron fotos para un libro y la emoción de ver los créditos es algo que me incentivó, pero, siendo sincera lo que más me encanta es la imagen viva por el tiempo. He tenido en mente el proyecto de fotografiar a personas de la calle. Esas arrugas, el maltrato del clima, las manos, sus rasgos, me causan algo, no sé que es, de algo estoy segura, los admiro mucho.
Pero por lo pronto estoy en afán de flores.
Hay una casa hermosa que queda de camino a la escuela de mi hijo, la casa en si no tiene nada de especial, las casas de por allí son todas iguales pero, esta casa está adornada del frente con muchas flores, rosales, belenes, y algunas de las que no conozco sus nombres. Esta pequeña casita que es de interés social me demuestra que podemos hacer de nuestra vida lo que queremos, a veces no tenemos grandes medios pero podemos hacer mejor lo que tengamos.
Así que estás hermosas flores son de esa casa y como no tiene patio están al borde de la banqueta que también es pequeña, sobre unas tabletas que sirven de base.
Las fotografías son tomadas con el teléfono, que para ser de teléfono no están nada mal, no se dejen llevar con las mentiras de que un teléfono toma mejores fotos que una cámara. Simplemente eso no es verdad.
Ya casi viene la graduación de Chris. Ese día quizá tenga muchas fotos que compartir.